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Sergei Eisenstein y El capital de Marx

A fines de 1929, mientras Occidente se remecía por el Viernes Negro, Sergei Eisenstein planeaba filmar El capital de Karl Marx de manera experimental, rompiendo todos los cánones establecidos y las directrices del Estado soviético. Sin embargo, la película no se hizo y quedó en el olvido. A continuación, se relatan algunas ideas sobre este proyecto inconcluso que fue recuperado años más tarde por el documentalista y cineasta alemán Alexander Kluge.

Eisenstein fue el cineasta más famoso de la Unión Soviética. Muchos intelectuales, desde diversos campos, han analizado su pensamiento1 y obra cinematográfica. Introdujo ideas fundamentales respecto al montaje de atracciones, donde la dialéctica era su práctica y teoría (Deleuze,1983). El desarrollo de toda su filmografía debía cumplir los cánones de la censura y propaganda. Además, en él yacía la enorme responsabilidad de llevar a cabo una expresión cinematográfica que encarnara el espíritu de la revolución en todos los aspectos posibles e imaginables.

El Acorazado Potemkin (1925) es un clásico que refleja ese espíritu revolucionario y el corazón mismo del país. La trama se basa en la rebelión de marineros durante el inicio de la Revolución de 1905. El objetivo fundamental consistía en emocionar y convencer a los soviéticos desde un punto de vista ideológico. En ese sentido, según la propia concepción de Eisenstein, expresaba una etapa intermedia en su cinematografía ya que debía recurrir forzosamente a vacilaciones, llantos y sentimentalismo como una estrategia para conseguir llegar a un público masivo. Tal como señala Sánchez Biosca (2004), el film “era considerado un retroceso al igual que la Nueva Política Económica” (p.63). Es por ese motivo que el cineasta esperaba evolucionar hacia una forma de arte anti-representacional2.

Eisenstein, en pocos años se había involucrado directamente en los temas relevantes para la revolución socialista. Este esfuerzo se ve reflejado en las películas La Huelga (1924) y Línea general (1929), que representaban el espíritu del movimiento obrero y el problema agrario durante el Primer Plan Quinquenal, respectivamente.

El Régimen, además, había apostado por el cineasta para que representara la Revolución de 1917, que en esos años celebraba su décimo aniversario. La película se tituló Octubre (1928) cuya producción contó con alto presupuesto y la disponibilidad de la ciudad de San Petersburgo (Leningrado) para las locaciones. Al momento de la edición, el cineasta recibe todo el peso de la censura estalinista3, obligándolo a reducir el material filmado y de paso retirar las imágenes donde aparecía Trotsky. El gran esfuerzo por cumplir los plazos impuestos dejó al cineasta al borde del colapso nervioso y parcialmente ciego por el uso de precarios instrumentos de edición.

Entre 1927 y 1928, en un deplorable estado de salud, el cineasta comenzó a escribir notas para filmar El capital4. El contenido del escrito tiene alrededor de 25 páginas y su estilo parece más bien un diario de vida inconcluso.

Las notas evidencian que la filmación no sería como sus películas previas (La Huelga, El Acorazado Potemkin y Octubre), más bien se atrevería a romper todos los cánones establecidos por el cine de aquellos años, basándose en la novela de Ulises de James Joyce. A Eisenstein le fascinaba la idea de que un día en la vida de un hombre irlandés común, Leopold Bloom, pueda condensar toda la historia universal. El montaje no sería una historia lineal, sino más bien algo parecido al flujo de conciencia que se encuentra en Ulises.

Según Alexander Kluge (2010), Eisenstein retrataría los conceptos más provocativos de El capital5, y no tendría un final o cierre donde el gobierno revolucionario se toma el poder, ya que “una visión de futuro debía producirse en la realidad y no el cine” (p.134). Desde el punto de vista dramático, la secuencia de la película además debía ser interrumpida por: “extensas crónicas familiares (de una generación a otra), por la historia de las herramientas y una historia de la riqueza (desde la era axial de Egipto hasta la actualidad)” (p.134).

Filmar El capital se pensaba como una propuesta experimental que concebía arte y ciencia como un mismo fenómeno: “Puede lograrse que un espectador sienta y piense lo que ve en la pantalla. Podemos darle a una formula científica la calidad emocional de un poema” (Broddy, 1977). Así, el argumento de El capital podría ser entendido hasta el más humilde de los campesinos. Al respecto, Kluge (2008) señala que llevar a imagen este libro puede aclarar mejor las situaciones que expone Marx, y de esa manera, el mensaje puede llegar a todos los estratos de la sociedad6.

Hacia fines de 1929, el plan de Eisenstein para filmar El Capital seguía en marcha. Con esa idea en mente, el cineasta aprovechó un viaje a Paris para reunirse con James Joyce. Ambos intelectuales intercambiaron ideas, y se dice que Joyce intentó leer un pasaje de Ulises, pero debido a su avanzada ceguera terminaron escuchando una grabación de un disco con su voz. Es interesante agregar que el escritor decía que sólo dos directores en el mundo eran capaces de llevar al cine su novela: Ruttmann7 y Eisenstein.

Lamentablemente, el proyecto no tuvo apoyo formal en la Unión Soviética y tampoco en el extranjero. La idea parece haber quedado trunca no sólo por el ocaso del cine mudo hacia fines de la década del veinte, sino también por el aumento progresivo de la represión contra el mundo artístico. En ese contexto, todas las películas de Eisenstein fueron fuertemente censuradas, entre ellas: El prado de Bezhin (1937) y la segunda parte de Iván El Terrible (1958). En ambos casos el cineasta, evidentemente presionado, tuvo que realizar una retractación pública. Distinto fue el caso de Alexander Nevsky (1938) que dejó satisfecha a la censura, incluso la leyenda dice que Stalin después de ver la película “dio una palmaditas en la espalda diciendo: Sergei Mihailovich eres un buen bolchevique a pesar de todo” (Seton, en Bordwell, p.49).

Muchos años después de la muerte de Eisenstein, el documentalista y cineasta Alexander Kluge (2008) redescubrió las notas escritas para filmar El capital en el documental titulado Noticias de la antigüedad Ideológica: Marx/ Eisenstein/ El capital (2008)8. En esta monumental obra podemos advertir que el cineasta soviético vio en la novela Ulises una vía de escape ante las estructuras anquilosadas provenientes de la abrumadora ortodoxia del Régimen que lo censuraba constantemente. Así, Kluge inicia un largo viaje de 8 horas, donde entrega luces sobre las infinitas posibilidades y caminos para la comprensión y praxis del marxismo actual. Esos caminos ya existen, pero han pasado desapercibidos, censurados o bien se encuentran enterrados.

Bibliografía

Bordwell, D. (1999) El cine de Eisenstein. Teoría y práctica (Barcelona: Paidós)

Brody, S. (1977) Paris Hears EisensteinJump Cut. A Review of Contemporary Media No.14. Disponible en: https://www.ejumpcut.org/archive/onlinessays/JC14folder/Paris%20Hears%20E.html

Eisenstein, S. (1976) Notes For a Film of Capital. (traducción al inglés: Sliwowski, M; Leyda, J; Michelson A.) En October Vol.2 pp. 3-26 (The MIT Press). Disponible en: http://www.jstor.org/stable/778416

Deleuze, G. (1983). La imagen-movimiento. Estudio sobre cine 1. (Barcelona: Paidós comunicaciones).

Kluge, A. (2010). 120 historias del cine. (Buenos Aires: Caja Negra)

Rancière, J. (2001). La fábula cinematográfica (Barcelona: Paidós)

Sánchez-Biosca V. (2004). “El Acorazado Potemkin y los caminos de la pasión en el cine soviético. En Cine y Vanguardia Artística: conflicto, encuentro, fronteras (Barcelona: Paidós).

Filmografía citada

Eisenstein, S.

La Huelga (1924, 82 min). Unión Soviética, Sovkino.

Disponible en: https://www.youtube.com/watch?v=MFtepLths7A&t=39s

El acorazado Potemkin (1925, 77 min). Unión Soviética, Sovkino. Disponible en: https://www.youtube.com/watch?v=u13TMl9pnZA

Octubre (1928, 100 min). Unión Soviética, Sovkino.

Disponible en: https://www.youtube.com/watch?v=oFf9PcwITFc&t=73s

Línea General (1929, 121 min). Unión Soviética, Sovkino

Disponible en: https://www.youtube.com/watch?v=UEDed0o7FYs

El prado de Bezhin (1937,30 min) Unión Soviética, Gosudarstvennoe Upravlenie Kinematografii.

Disponible en: https://www.youtube.com/watch?v=oy5hwR_uRa8

Alexander Nevsky (1938, 112 min). Unión Soviética, Sovkino. Disponible en: https://www.youtube.com/watch?v=LpVtoUFKZ7w&t=3966s

Iván El Terrible. La conjura de los Boyardos. Segunda parte (1958,88 min). Unión Soviética, Sovkino.

Disponible en: https://www.youtube.com/watch?v=i5g-Ss9BDR4

Kluge, A.

Noticias de la antigüedad ideológica: Marx/Eisenstein/El Capital (2008). Alemania, Kluge, A; Kairos Film; Suhrkamp Verlag.

I Marx y Eisenstein en la misma casa (188 min)

Disponible en: https://www.youtube.com/watch?v=tXG9mtY3aHY&t=1237s

II Todas las cosas son embrujadas (120 min)

Disponible en: https://www.youtube.com/watch?v=GLaSIMj6O18

III Paradojas de la sociedad del intercambio (182 min).

Disponible en: https://www.youtube.com/watch?v=U6aUO8FJzcM&t=6s

1 El cineasta también publicó numerosos ensayos, tales como La forma del cine, El sentido del cine, Reflexiones de un cineasta, Anotaciones de un director de cine, La realización cinematográfica, entre otros.

2 Rancière (2001) señala que Eisenstein proponía un arte anti-representativo que iba a sustituir las historias y los personajes de antaño por ideas, sensaciones y la comunicación directa con los afectos.

3 La represión estalinista contra el mundo artístico aumentó durante la segunda década de los treinta. En esos años hubo arresto y asesinato de varios cineastas y dramaturgos, tales como Kirov, Tretyakov, Palayak, Mandelstam, Babel, Meyerhold, entre otros. Según Bordwell (1999), el número de cineastas asesinados fue bajo en comparación a la cantidad de escritores, posiblemente porque a Stalin le gustaba el cine, o bien, porque había pocos cineastas en la Unión Soviética y el dictador se habría quedado sin exponentes.

4 Las notas fueron traducidas al inglés con el siguiente nombre: Notes For a Film of Capital (1976).

5 Los conceptos que incorporaría serían los siguientes: “enorme cúmulo de la mercancía, riqueza social, alienación, fetichismo de la mercancía, circulación, dinero mundial, tasa de plusvalía, jornada de trabajo, gran industria, acumulación originaria hasta llegar a la teoría moderna de la colonización” (p.134).

6 En la tercera parte del documental Antigüedad ideológica con título Paradojas de la sociedad del intercambio, Kluge expone una larga discusión con Oskar Negt sobre el valor explicativo de la imagen, la cual siempre está en desmedro en relación con el valor de la palabra. Desprecio que es evidente por parte los círculos intelectuales que desestiman la imagen como una herramienta útil para el conocimiento. Pero la imagen, continua Kluge, tiene a su favor que puede aclarar mejor las situaciones para que sean comprendidas por toda la sociedad.

7 Walter Ruttmann: documentalista alemán de gran prestigio en Europa por la realización de obras de carácter experimental. Su película más reconocida fue el documental Berlín, Sinfonía de una gran ciudad (1927).

8 Noticias de la antigüedad ideológica: Marx/Eisenstein/El capital es un film documental de 8 horas. Se divide en tres partes: I Marx y Eisenstein en la misma casa (188 min.), II Todas las cosas son embrujadas (120 min), III Paradojas de la sociedad del intercambio (182 min). La versión original fue transmitida en la televisión alemana.

Actualmente, en Youtube es posible encontrar una copia de este documental. Se advierte que la segunda parte presenta problemas con el audio.

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